1. Imagina el final y los pasos para llegar
¿Cuál es la visión de la empresa y cómo se llega allí? Fíjese un objetivo final claro y realista y describa los pasos que lo llevarán allí. Concéntrese en el siguiente paso en lugar de centrarse en el objetivo final.
Ejercicio:
Dividir el objetivo en objetivos más pequeños, los guardias en el camino, esa es la guía. Concéntrese en los objetivos pequeños en lugar de solo mirar el objetivo final. Recuerda que la mentalidad de "todo o nada" no es sostenible, es mejor tener en cuenta que dos pasos atrás y un paso adelante es mejor que rendirse.
Siéntate cómodamente en privado. Cierra los ojos y permítete ver cómo pisas cada paso, llegas a cada guardia y finalmente llegas a la meta. ¿Cómo te sientes cuando llegas a cada etapa individualmente? Permítete ver la situación real por ti mismo.
Ver obstáculos en el camino - ¿Cómo vas a superarlos?
Examinar la incertidumbre y considerar posibles obstáculos para establecer metas. En lugar de concentrarse en los obstáculos en sí, concéntrese en cómo enfrentará los desafíos. La adaptabilidad y el ingenio son la clave para un enfoque orientado a la solución.
Ejercicio:
¿Qué podría impedir que se alcancen sus objetivos? Enumere todas las formas posibles de superar los obstáculos que puedan surgir hacia la meta establecida, considere cómo va a responder a los desafíos y encuentre soluciones.
3. Seleccione binoculares orientados hacia adelante
Elija el telescopio optimista y esperanzador en lugar del pesimista cuando mire hacia adelante. No se trata de ignorar los pensamientos negativos, sino de centrarse en lo que podría salir bien en lugar de centrarse en lo que podría salir mal. Es más fácil buscar pensamientos negativos que positivos, por eso es importante entrenar el pensamiento. El optimismo y la positividad aumentan la creatividad y fomentan el pensamiento orientado a la solución.
Ejercicio:
4. Cree en ti mismo y en el equipo
Ten fe en ti mismo, en tu empresa y en tu personal. Muestre comprensión hacia usted mismo y hacia los demás y concéntrese en generar confianza en el personal, por ejemplo, brindando comentarios constructivos, elogios cuando corresponda y notando y fortaleciendo las fortalezas del personal. Brinde a los empleados la oportunidad de expresar sus opiniones, causar impacto, ser parte de conversaciones que tocan la visión de la empresa e involucrarse en las decisiones que se toman. La formación profesional, la educación y el apoyo de los demás aumentan la confianza en las propias capacidades.
5. Crea una sólida red de apoyo
Una fuerte red de apoyo puede apoderarse de los gerentes y el personal en tiempos de incertidumbre. Piense en su propia red de apoyo: quién proporciona usted orientación y apoyo? ¿Qué te motiva a seguir adelante? ¿Pueden los empleados buscar apoyo en el lugar de trabajo? Construya un ambiente de confianza y pueda hablar honesta y sinceramente sobre lo que está pasando en un momento dado. Genere confianza escuchando las necesidades del personal y respondiendo lo mejor que pueda.